Spooktober día 8: Bruja

—Mari nos ayudará—su voz, un poco temblorosa, trataba de calmar los nervios de su hermana pequeña, mientras escalaban con paso lento, pero firme, el monte Anboto.

—¿Tú crees que nos explicará lo que me pasa?

—Pues claro, Argiñe, es una diosa. Y sospecho que probablemente tenga algo que ver con tu estado.

—Tengo miedo. ¿No crees que la estaremos molestando? Entrando en su casa, sin avisar ni nada…

—Argiñe… en el momento en que pusimos un pie camino a la cueva sabe que estamos aquí… Y para eso está, para atender a las personas. Además, pregunté a amama y me dijo que, si seguíamos el ritual correctamente, Mari no se enfadaría.

—¿Ritual?

—Tres cositas de nada: tutearle, salir exactamente como hemos entrado y no sentarnos bajo ningún pretexto.

—Jo, pues yo estoy cansada de tanto subir…

Tras estas palabras, miró a su hermanita y observó con leve tristeza su agotamiento. Estaba pálida, pero había algo de eléctrico en ella, un aura de poder antiguo que, sospechaba, sólo Mari podría explicar. Decidió auparla en sus brazos para terminar el trayecto.

A la entrada de la cueva, la bajó.

—Recuerda que tendría que salir contigo aupas y no sé si tendré fuerza suficiente—dijo, a modo de explicación.

La cueva tenía una iluminación extraña, que proyectaba un aura solemne. Mari habló antes que las hermanas:

—Sé por qué habéis venido a mí. Os daré las explicaciones que ansiáis.

—Gracias, Mari. Eres benevolente y queremos servirte.

—Solo Argiñe ha sido seleccionada para ser creadora, una sorgina…

—¿Entonces no me pasa nada malo? —interrumpió la hermana pequeña.

—El poder que te he concedido es un regalo y una maldición. Habrá gente que te quiera hacer daño por envidia de tus poderes. Por eso tienes a tu hermana, que no tiene poderes, pero tiene algo tan importante: amor por ti, capacidad de lucha, resiliencia. Las dos juntas seréis más poderosas que nadie. Las dos juntas, viviréis en paz.

El silencio y la oscuridad que prosiguieron las llenaron de una calma que las hermanas nunca antes habían conocido.